Los ojos puestos en el premio
Parece como si todos esos regímenes de entrenamiento y todo ese trabajo en el gimnasio como niño fuera suficiente para darle a Richard la energía necesaria para realizar cualquier meta que se proponga. Ahora está mucho más decidido que nunca a entrar en la NASA. Richard dijo que no esperaba que sus sueños se cumplieran, sino que simplemente sabía que lo conseguiría.
Richard sostiene que todo lo que necesita hacer es poner el mismo esfuerzo en aprender una nueva profesión, como ha hecho durante años cuando era escultor de su cuerpo. Ya lo ha hecho antes y muchos no pueden esperar para ver si Richard va a conseguirlo otra vez.