En realidad… ¡No lo siento!
Se dice que ir a la cama estando enojado es una mala idea y esta foto lo demuestra. Luego de tener una fuerte discusión, los miembros de esta pareja se fueron a la cama enojados. A la mañana siguiente, las cosas parecían mucho más claras. Este hombre sabía exactamente lo que necesitaba para vengarse de su novia. Le preparó el almuerzo para que lo llevara a la oficina, en teoría, a modo de disculpa.
Cuando ella le dio un mordisco a su almuerzo se dio cuenta de que ese no era un emparedado de disculpa y que su discusión estaba lejos de haber terminado. Él no lo sentía por el emparedado y tampoco lo sentía por la pelea de la noche anterior, al haber dicho aquellas cosas sobre sus amigos.