Tomando la decisión equivocada
De niños, no hay casi nada que nos gustara más en los meses de calor que escuchar la canción del camión de los helados, indicando que se acercaba. Una de las decisiones más difíciles en ese tiempo (antes de que tuviéramos que crecer y tomar decisiones de adultos) era elegir el sabor del helado. Si lo piensas, el problema real era que había demasiadas opciones.
Después de elegir su sabor favorito, Lenny e Ian estaban disfrutando de sus helados, hasta que Ian le dio una mirada al cono de su amiga y se dio cuenta de que había cometido un grave error. Tal vez era el tamaño de su helado comparado al suyo lo que lo hizo sentir engañado, o quizás vio cuánto lo estaba disfrutando ella, pero el pequeño Ian no pudo evitar sentirse celoso.